ORGULLOSO DE MI HERMANDAD


En días como hoy, me siento más orgulloso de pertenecer a la Hermandad del Prendimiento, de corazón, ver ayer a todos los niños de la cofradía repartir el roscón y con la ilusión que lo hacían nos da una prueba de como se toman esta actividad. Por otra parte, un ¡OLÉ!, por todas las mujeres que ayer, estuvieron toda la tarde con la paleta calentando los casi cien litros de chocolate. Días como hoy, cuando bajas al quiosco y ves en portada de los rotativos a la Hermandad, me recuerda al Lunes Santo, donde aparece la reseña de lo acontecido en la tarde del Domingo de Ramos y aunque hoy el fin y las fotos son otras, lo que no cabe duda, es que es la misma Hermandad, y eso ensancha el corazón de manera singular. Es muy grande lo que lleva a sus espaldas esta hermandad, en diez años de historia ha conseguido hacer grandes logros, ya no solo en cuestión de patrimonio artístico sino, en el patrimonio humano haciendo aún más grande la hermandad, solo una mirada lejana en el tiempo pondrá el verdadero valor a todo lo andado.

Comentarios